sábado, 1 de agosto de 2020

Hace unos meses logré acercarme a la sensación de no solo hacerme un favor a mi mismo, dandome espacios de autocuidado, sino que delegando gran parte de mi tiempo a lo que compete a lo ecológico. Tras 4 meses con copostera, como familia pasamos de sacar la basura 3 veces a la semana a 1. Ecoladrillos, huerta, reducir huella de carbono, plantar flores que ropicien polinización, generar espacios de conocerte a ti mismo a través de la naturaleza. Hay cosas positivas y son un desafío, enfrentarte a ti mismo y a lo que involucra estar inmerso en un medio bio-psico-social. La lucha no solo es en un posteo ni en poemas, ni en emociones ni en discursos. La lucha va desde un cuestionar que surje en acciones que desafían tu normalidad; marchas, charlas, temascales, conversas que cambian el mundo. Hay que hacer weas que nos hagan bien, y que le hagan bien al mundo. Hay que dejar el discurso panfletartio y pasar a la acción. Ayudemonos loco, como cresta vamos a seguir siendo la misma mierda que nos llevo a llegar a crisis social, ecológica, económica, espiritual, emocional, familiar.. Está bien, cualquier esfuerzo que aproxime a la transformacion será positivo. La plaga del ser humano se transforma cuando pasamos a Ser humanos.

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