resulta que no ví la trizadura
fue cosa sutil
imperceptible para los que impercibimos
incomprensible para los que se creen se las traen
una mosca molesta mi estancia
en vez de auyentarla prefiero matarla
allí recide la naturaleza de mis miedos
la brevedad de los días es la angustia de decir adios
el corrompido y ebrio sentido de supervivencia
pasa por una crisis
dura, larga, la mas intensa que jamás habra en mi camino
pero conllevados con temple y firmeza
te podre invitar a mi mesa
tocar tus manos y sentir tu cuerpo que se pone frío
con la fluidez de los sentires
con los confundidos fundados
en los ojos de del infortunio esta la duda riendo en su trono
gira y trompea sin saber que se marea
vomita en un jolgorio y en la poca y nada ayuda
de un joven que se enferma a prisa
vivir la risa
sentir la brisa de tu sonrisa
sin prisa por el amor de dios
no habrán cenizas pues terminaremos como polvo de estrellas
guiando mares y siendo pastores
del propio camino
unido y co-hesionado
he dicho y sentensiado
en la muerte erroneamente había confiado.
sábado, 3 de septiembre de 2011
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