viernes, 10 de junio de 2011

que veráz aquel
de cal y piedra fundida
de leña y bosques nocivos
de pezes cultivados
mercados saqueados
bancos desbordante de sueños en venta

que simple el intento
de tomar mi mano de mi sobrina al nacer
de tomar mi mano de mi padre al morir
de tus caricias para mi
que tocan tu corazón y no el mío.

Así, padre, valoro cada intento por amarnos hasta siempre
cada noche compartida y cada té preocupado
No hay virtudes ni valores en la vida
sin tu sabio temple y cándida entrega
no hay lagrima que me derrote pues me enseñaste el infinito respeto a la vida

y sí, me conoces bien como para no tener que engañarte
no diré no lo hago pues hay veces me desprecio y daño a mi mismo
no diré no odio esta existencia pues a ratos solo ideas suicidas rondan mi cabeza
pero hay respeto
hay paciencia
hay ganas de superar esta demencia

aparecen inundando mis recuerdos, sus huesos podridos
tu piel rohida, convertida en carne para gusanos
tu recuerdo en tanto, no es eso.
no se queda en el cadaver que han dejado
soy dador guía
de vida y simpatía
musica y alegría
para siempre en nuestras vidas
hundirnos en un gozo del que nadie será indiferente
la tierra y sus días contados.

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