son cuentos y fábulas, con moralejas y castillos
somos la realidad del dominio, la aceptación de lo ambiguo
las letras corrosivas que aburrieron hace tiempo.
somos ese viento de cavernas y grutas, túneles, acantilados
escondidos en el fondo de la tierra hace cientos de años, estamos viejos y huraños
solo necesitamos el sabor que despierte la intuición
para no confundirnos entre tanto sentir
deja ser el colibrí que te visita
para decirte, estas bien, tienes una flor de néctar abundante
tienes un jardín dispuesto a anidar
entonces
para que cargar el peso de los dolores
ahora sabemos quienes somos, no existen dudas ni desaciertos
pues la melodía te hizo dormir bien, ya ves
que todo se hunde y decanta, la verdad de la planta
me eleva el alma saber que cantas la canción del olvido, del enemigo y el amigo
pues para mi esos son tambores que avecinan inviernos crudos, que sobreviviremos
pues hacemos el amor en la calle y en imprentas, en la rutina y en el ritmo que te invade
es lo que tienes, es lo que somos
la soleda absoluta fue abolida con los dogmas, la utopía, el cáncer
apareceran nuevas dudas y un vacío interminable
en el que puedes ser cimiento, pilar, techo, o un huesped impredecible
nada se juzga, todo se entiende en esta sintonía
intenta cambiarla para ver que pasa, y sorprenderás a tu karma con la calma que embarga
romprer destinos, fabricar caminos
hay uno que ni la muerte entenderá
¿lo caminamos?